-
“¿Eres un hada?”
-
“Soy” – respondió el hada.
-
“¿Puedes volar?”.
-
“Puedo”.
-
“¿Y hasta dónde puedes volar?” – preguntó la niña.
-
“Hasta el cielo y más allá”.
-
“Pues llévame hasta allí que tengo que hablar con
mi mamá. Es sobre mi papá que me ha buscado una mamá nueva que no me gusta”.